La Central
Amistades, compañeras, alianzas, amores y poliamores, relaciones abiertas, cerradas o rotas, camaradas, conocidos o familiares y una infinidad otros posibles vínculos, formas de apoyo y de cura para crecer y afrontar nuestro día a día.
El asombrario
Clarín (Revista Ñ)
Mezcla de manifiesto contracultural, utopía, fábula y sátira, el texto se publicó originalmente en 1977 y circuló durante décadas de mano en mano, convirtiéndose en una obra de culto para la comunidad LGBTQ+. Hoy, editado por consonni, puede leerse por primera vez en castellano.
Belfusto
En esta obra de culto, concebida como un trasunto subversivo de fábula infantil, la fantasía -catalizada por las míticas ilustraciones de Ned Asta (Nueva York, 1947)- y la utopía marcan el compás de las diversas comunidades maricas que (sobre)viven en Ramrod.
Dos Manzanas
Hala Bedi. Suelta la olla
Infobae
Tras la revuelta de Stonewall en el ‘69, la literatura LGBT+ comenzó a tener una mirada más profunda, ingresando al campo de sus derechos civiles. Infobae Cultura recupera en esta nota dos obras imperdibles que acaban de ser publicadas: “Maricas y sus amigas entre revoluciones” y “Diario de un sueño”
Cuaderno WHR
El texto es producto de la contracultura de los años setenta que desarrolló visiones utópicas en busca de la aceptación de identidades diversas, la neutralidad de género y el compromiso ecologista.
Wisteria Lane
Kultura, Radio Euskadi
Página 12
Se publica por primera vez en castellano una obra de culto de 1977 pionera del movimiento queer estadounidense. El libro de Larry Mitchell propone a maricas, mujeres, lesbianas, reinas y “raros” como protagonistas de una revolución radical contra el patriarcado y el capitalismo.
El Español
Este texto es mucho más que una fábula disruptiva: a pesar de su condición de cuento desobediente, resulta también un documento exquisito y descriptivo para entender los cambios de una época.
El receptor
Ñ, Clarín
«El libro, en efecto, testimonia esos sentimientos, abraza las revoluciones por venir y, desde el comienzo, brinda "por los viejos maricas, que estuvieron allí y ayudaron a que esto ocurriese tan solo por haber estado allí". Ahora es el propio texto el que queda como testimonio de época, como marca de pasado que se actualiza para mirar el presente».